Envejecimiento Vascular: ¿Podemos evitarlo?

Envejecimiento Vascular: ¿Podemos evitarlo?

Por: Dr. Carlos Alberto Maiorana Rivero – Cardiólogo/Ecocardiografísta.

En el año 2018, el estudio sobre la carga global de enfermedad publicado en la prestigiosa revista médica Lancet, mostró el comportamiento de la pandemia de las enfermedades cardiovasculares en 195 países del mundo desde 1950 hasta 2017, con una prevalencia estimada de 422 millones de casos. En estos 40 años se ha observado una reducción en la mortalidad cardiovascular principalmente en países desarrollados con una prolongación de la expectativa de vida, en vista del enfoque en el diagnóstico y manejo temprano de la ateroesclerosis (44% de la disminución en mortalidad se debe al mejor control en las cifras poblacionales de colesterol, presión arterial y tabaquismo).

Sin embargo, países en vías de desarrollo como en la República Dominicana las enfermedades cardiovasculares continúan siendo la principal causa de morbilidad mortalidad, esto debido a la dificultad en el diagnóstico y manejo de los factores de riesgo modificables: hipertensión arterial, tabaquismo, diabetes mellitus y obesidad, como lo muestran datos de la organización mundial de la salud en el año 2016.

La aterosclerosis es un proceso progresivo que comienza temprano en la vida y continúa hasta la senectud. Estudios longitudinales a largo plazo en adultos han demostrado claramente que muchos factores de riesgo cardiovasculares (obesidad, dislipidemia, diabetes mellitus, hipertensión, tabaquismo) se asocian con aceleración y envejecimiento vascular precoz, contribuyendo en mayor probabilidad de la morbimortalidad cardiovascular temprana.

Este envejecimiento vascular se asocia a cambios estructurales en el vaso sanguíneo y a disfunción del endotelio (conjunto complejo y organizado de células, que tapiza la luz de todos los vasos sanguíneos); capaz de provocar rigidez y contracción del musculo liso vascular, debido principalmente a la disminución de sustancias vasodilatadoras como el óxido nítrico (NO) y aumento de sustancias vasoconstrictoras como endotelina I (ET).

La actividad vasoconstrictora ocasionada por la disfunción endotelial provoca aumento en la proliferación celular, hipertrofia del músculo liso vascular, endurecimiento vascular, inflamación, generación de agentes reactivos de oxígeno y fibrosis de los vasos sanguíneos.

Favoreciendo estos cambios al desarrollo de ateroesclerosis (formación de placa lipídica en el vaso sanguíneo), al progreso de hipertensión arterial, a la aparición de diabetes mellitus y posteriormente al incremento precoz de complicaciones cardiovasculares fatales y no fatales.

Es importante destacar que el envejecimiento vascular ocurre desde las primeras edades de la vida, por lo que puede ser detectados en niños y adolescentes con alto riesgo cardiovascular a través de técnicas de imagen como el ultrasonido vascular carotideo, evaluando el espesor miointimal carotídeo y/o la rigidez arterial, como lo mostraron en el año 2019 en Argentina el grupo del Dr. Claudio Morós, donde el 58% de los pacientes analizados tuvieron envejecimiento vascular acelerado, siendo los más afectados: los varones, con diabetes mellitus tipo 1 y dislipidémicos.

En el ensayo realizado por el Dr. Justin R. Ryder y su grupo publicado en el año 2020, mostraron en 5 años de seguimiento que adolescentes con obesidad, hipertensión arterial y diabetes mellitus tipo 2, presentaban un significativo proceso de envejecimiento vascular acelerado comparado a los adolescentes controles, exhibido por un aumento significativo del grosor íntima media carotidea y la rigidez arterial, a través del ultrasonido vascular.

En vista de estos cambios apreciados en las arterias desde la niñez, las sociedades científicas americanas y europeas, actualizan continuamente las directrices para la prevención, diagnóstico y manejo de patologías cardiovasculares. En esta oportunidad, por ser más fáciles de entender y digerir les comparto las directrices sobresalientes de las ultimas guías europeas sobre Prevención de Enfermedad Cardiovascular publicadas en el año 2021.

Sugieren contemplar para una correcta prevención cardiovascular de los pacientes:

• Valorar y estimar individualmente el Riesgo Cardiovascular a 10 años, según la presencia de factores de riesgo.
• Personalizar estrategias de gestión en la prevención de enfermedades cardiovasculares en poblaciones sensibles, como los adultos mayores.
• Determinar los factores de riesgo mayores para el desarrollo de enfermedad cardiovascular aterosclerótica: colesterol, presión arterial, tabaquismo, diabetes y adiposidad.
• Establecer objetivos y metas individuales para el control y manejo del: colesterol y perfil lipídico (principalmente colesterol LDL), presión arterial y control glucémico, a cada paciente según su riesgo.
• Considerar las exposiciones ambientales como factores modificadores potenciales de riesgo para enfermedades cardiovasculares (contaminación del aire y del suelo, niveles de ruido y los efectos del cambio climático).
• Considerar otros factores modificables como: antecedente de enfermedades cardiovasculares prematuras, stress psicosocial, fragilidad en el adulto mayor, condiciones inflamatorias crónicas (ejemplo artritis reumatoide), sueño poco reparador, presencia de grasa visceral ectópica, presencia de albúmina en la orina y en el sexo femenino (hipertensión arterial gestacional, preeclampsia y ovario poliquístico).

Sugiriendo en estas pautas, medidas generales y no farmacológicas para la prevención de enfermedades cardiovasculares:

  1. Actividad física regular. Se recomienda la realización de actividad física aeróbica de moderada intensidad (150-300 min por semana) o vigoroso (75-150 minutos por semana, junto con ejercicios de resistencia, 2 o más días por semana).
  2. Dieta saludable y equilibrada. Un cambio de una dieta basada en animales a una basada mayormente en vegetales y frutas (ejemplo la dieta mediterránea).
  3. Mantener un peso ideal. En individuos con sobrepeso y obesidad plantear uso de fármacos anti-obesidad o cirugía metabólica (si no hay correcta respuesta a los cambios de estilo de vida y farmacoterapia).
  4. Cesación tabáquica. Ha demostrado que retirar los cigarrillos, rápidamente reduce el riesgo y envejecimiento cardiovasculares prematuro.
  5. Cesación o consumo bajo de alcohol. Su ingesta marcada y excesiva se asocia con envejecimiento vascular, muerte y discapacidad prematura.
  6. Control de cifras de presión arterial, glucosa sanguínea, y todo el perfil lipídico, según el riesgo cardiovascular de cada paciente.

Además de estas medidas, como grupo multidisciplinario de especialistas en el control de Riesgo Cardiometabólico, añadimos otras sugerencias a nuestros pacientes y así fomentar hábitos de vida cardiosaludables:

  1. Ingerir 2 a 3 litros de agua diaria.
  2. Disminuir la ingesta de sal, azúcar y harina diariamente.
  3. Caminar 10.000 pasos diarios para mejorar adiposidad visceral.
  4. Tener un sueño reparador continuo de 6 a 7 horas diarias, por las noches.
  5. Evaluación por Nutrición y Psicología
  6. Tratamiento farmacológico dirigidos al manejo de factores de riesgo modificables, según el Riesgo Cardiovascular Global de cada paciente.
  7. Control y Evaluación Anual de Riesgo Cardiometabólico en prevención primaria, o cada 3 a 6 meses como prevención secundaria; según directrices de la Asociación Americana de Corazón y la Sociedad Europea de Cardiología.
    Como grupo especializado, participamos en la Unidad de Prevención de Riesgo Cardiometabólico, Lípidos y Obesidad de IMEDIX, en Santo Domingo Este. Desde el mes de Agosto del año 2021, somos la primera Unidad en la República Dominicana destinada a la prevención, diagnóstico y manejo terapéutico del riesgo cardiometabólico y enfermedades cardiovasculares en la población, con Certificación y Aval Internacional proporcionado por el Consejo de Prevención Cardiovascular de la Sociedad Interamericana de Cardiología (SIAC); también formamos parte en el control y manejo de Riesgo Cardiometabólico en prevención primaria y secundaria, en HS Medical Center, ubicado en Distrito Nacional.

Culminamos destacando que, con un inicio precoz y continuo de las medidas sugeridas con anterioridad, podremos lograr reducir la edad vascular de forma temprana y sostenerla en el tiempo, siempre teniendo como premisa la gestación de un individuo cardiosaludable, que posea una correcta salud mental y física para toda su vida.

“Si alguien desea una buena salud, primero debe preguntarse si está listo para eliminar las razones de su enfermedad. Solo entonces es posible ayudarlo.”
Hipócrates de Cos (Cos, c. 460 a. C.-Tesalia c. 370 a. C.)

Referencias Bibliográficas

  1. Dicker D, et al. Global, regional, and national age-sex-specific mortality and life expectancy, 1950-2017. Lancet. 2018;392:1684–1735.
  2. Mitchell GF, et al. Arterial stiffness and cardiovascular events: the Framingham heart study. Circulation. 2010;121:505–511.
  3. Carolina Pemberthy López, et al. Conceptos actuales en el envejecimiento y la enfermedad cardiovascular Carolina. Rev Colomb Cardiol. 2016.
  4. Claudio Morós, et al. Detección del envejecimiento vascular acelerado por ecografía carotídea en niños y adolescentes con alto riesgo vascular Rev. Hosp. Niños (B. Aires) 2019;61(272):25-31.
  5. Justin R. Ryder, et al. Accelerated Early Vascular Aging Among Adolescents With Obesity and/or Type 2 Diabetes Mellitus. J Am Heart Assoc. 2020;9:e014891.
  6. David Carballo, et al. The ‘ten commandments’ for the 2021 ESCGuidelines on CVD prevention. European Heart Journal (2021) 00, 1–3.

Dr. Carlos Alberto Maiorana Rivero
Cardiólogo – Ecocardiografísta.

Fellow de la Universidad Central de Venezuela
Miembro del Consejo de Lípidos y Aterosclerosis de la Sociedad Dominicana de Cardiología
Máster Universitario en Avances de Cardiología de la Universidad Católica de Murcia
y Sociedad Española de Cardiología
Miembro de la Asociación Dominicana para el Estudio de la Obesidad
Cardiólogo del Staff Medico en HS MEDICAL CENTER
Coordinador Unidad de Lípidos, Obesidad y Riesgo Cardiometabólico de IMEDIX